domingo, 26 de febrero de 2012

A.I. (Inteligencia Artificial)


     Concebida originalmente por Stanley Kubrick, Inteligencia Artificial es una película que cuenta la historia de un robot con una apariencia exactamente idéntica a la de un niño humano. Kubrick, llegando al final de su vida y estando más implicado en su última película Eyes Wide Shut, pidió expresamente a Steven Spielberg que fuese él quien se encargase de llevar a cabo la película. 

Es una gran producción del año 2001, como explican los propios creadores en el siguiente video:




Entrando más en la temática de nuestra asignatura, es evidente que aparecen varios elementos de Inteligencia Artificial en la película. Veamos cuales se podrían resolver a día de hoy y cuales no.


En primer lugar, tenemos al Dr. Know.


 Éste es una combinación de un holograma y una gran base de datos que relaciona términos entre sí de forma que puede encontrar la respuesta a las preguntas que se le formulan. Un holograma es algo que hoy en día se resuelve bastante bien, aunque no posee inteligencia artificial propiamente dicha.
Es bastante interesante este ejemplo que nos llega de JAPÓN.


En el caso del Dr. Know, la inteligencia artificial reside en su capacidad de contestar a las preguntas que le plantea David.

Es muy realista el hecho de que funcione por categorías puesto que este tipo de programas está diseñado para contestar un tipo de preguntas en un ámbito determinado. Todo el sistema se basa en la relación de conceptos, como vimos en la primera clase con Watson.





En segundo lugar, aparece un Helicóptero-Submarino:





La inteligencia artificial de este aparato reside en un sistema de auto-conducción con un GPS incorporado que responde a una aplicación de comanda vocal.  Es inteligente porque se le dice a donde tiene que llegar, pero no como llegar a ese destino. El propio sistema, mediante un ordenador con GPS elabora la ruta por sí solo.

Hoy en día tenemos coches, aviones, helicópteros y barcos que se conducen solos, siguiendo esta técnica que puede llegar a ser bastante alucinante, como podemos ver en este ejemplo de helicópteros inteligentes RANGE.
Por lo tanto es algo que si que podríamos eventualmente resolver hoy en día.

Lo que es algo más complicado son los robots o, como se les llama en la película, los Mecas:



En el caso de los mecas, hay que decir que estamos muy lejos de conseguir algo así tanto en el ámbito de la robótica como en el de inteligencia artificial. 





El aspecto de los Meca es casi indistinguible del de los humanos y la complejidad de sus movimientos es también muy parecida a la nuestra. En el plano físico, se ven y se mueven exactamente igual que los humanos. 



A día de hoy se pueden hacer cosas bastante impresionantes, como ésta:



Pero seguimos sin llegar a la perfección que existe en los Mecas de Spielberg; aunque si que es posible que lleguemos algún lejano día hasta ese punto en términos de robótica.

En el plano inteligente, si que puede notarse una diferencia entre los humanos y los Meca. 

Sin embargo, son capaces de mantener conversaciones prácticamente humanas, pero lo más importante, y esto es algo a lo que probablemente nunca lleguemos, tienen consciencia de sí mismos. Saben que son robots y aceptan estar sometidos a los humanos, aunque Joe (Jude Law) llega a decir que al final los robots seguirán existiendo cuando se extinga la raza humana.


Otro caso parecido es el de Teddy, que tiene también consciencia de si mismo, aunque no llega al nivel de pensamiento y de iniciativa que tienen los Mecas.




Caso especial, el del protagonista de la película, David, quien a demás de tener consciencia de sí mismo además de la apariencia y movimiento humanos, posee la capacidad de Amar. Lo interesante, es que esta capacidad de amar de David crea en el un objetivo: el de conseguir el amor de su madre, que llega a abandonarlo. Sin estar programado para ello, David hace de ese amor no correspondido su eterno objetivo, puesto que como es una máquina, no puede parar de luchar por ello. Relaciona "amor" con "niño de verdad", por lo que Spielberg nos cuenta otra versión de la historia de Pinocchio y bucar al hada azul delante de la cual espera 2000 años, hasta que es encontrado por unos seres futurísticos que en la película prentenden ser robots del futuro.


Los Robots del Futuro, son evidentemente seres que tecnológicamente somo imposibles de crear a día de hoy, de hecho ni siquiera se explica bien en la película las capacidades que tienen. Aparentemente serían robots que son ahora los habitantes de la tierra ya que la raza humana ha desaparecido (como había predicho Joe).


El final de la película suscita bastantes discusiones entre los espectadores al acabar la película. Spielberg se justifica así:





Discutamos finalmente las Implicaciones Morales que supondría la realización de la inteligencia artificial que aparece en la película.

Sería bastante cuestionable crear un robot con la capacidad de amar por varias razones. La primera es que el amor es algo que determina a los humanos y que tienen que hacer ellos solitos. Si la gente empieza a amar y ser amado por robots, al cabo de un tiempo dejarán de amarse entre ellos y el mundo sería entonces un lugar bastante triste en el que estar. 
Otra linea de debate es la de los sentimientos del supuesto robot capaz de amar. Cuando un ser tiene consciencia se si mismo, tiene iniciativa y deseos... ¿es un ser vivo? Y si tiene apariencia humana, anda igual que los humanos, habla igual que los humanos y tiene sentimientos... ¿Lo convierte eso en un ser humano?
¿Hasta que punto puede sufrir una máquina?

Mi teoría es que dentro del universo creado en la película, si David es un ser humano y por lo tanto sufre. Pero, en el mundo real, nunca jamás seremos capaces de crear robots que tengan sentimientos reales. Podrán haber simulaciones estupendas que nos hagan llorar de pena y que sintamos muchisima más condescendencia por una máquina que finge bien que por un humano que sabe esconder mejor su tristeza.

Una máquina es una máquina y por mucho que tenga apariencia humana, perfecta, seguirá siendo una máquina, por mucho que le hayan enseñado a fingir sentimientos.
La única posibilidad de crear vida propia sería crear una persona con bases orgánicas, como Frankensein, que tuviese sentimientos. En ese caso, la diferencia entre un humano y ese... ser, sería mucho más dificil de definir. 

viernes, 17 de febrero de 2012

Blade Runner


Blade Runner es una película dirigida en 1982 por Ridley Scott, que nos presenta una realidad futurista -y en gran medida, decadente- en la que los humanos conviven con los "replicantes", seres artificiales creados mediante ingeniería genética. A pesar de tener aspecto completamente antropomórfico y aptitudes, tanto físicas como intelectuales, incluso superiores a las humanas, los replicantes son empleados como esclavos  para tareas poco apetecibles para los hombres.



La película toma como punto de partida la ilegalización de los replicantes debido a un sangriento motín, tras el cual la policía crea el cuerpo especial de Blade Runners, entrenado específicamente en el "retiro" de los replicantes. El agente de policía Deckard (Harrison Ford) pertenece a este equipo especial y será designado para dar caza a un grupo de replicantes modelo Nexus-6 que se han dado a la fuga. En el siguiente enlace se puede acceder a la ficha completa de la película en IMDB






Blade Runner es una de esas cintas que ha logrado colarse en la Historia del Cine como un film mítico, debido a su polémico enfrentamiento entre hombre natural versus ser orgánico artificial, a sus múltiples versiones y reediciones y a toda serie de merchandising y objetos de culto que se han generado de forma paralela a la película. Un ejemplo de ello son las fotografías que la actriz principal, Sean Young, tomó con su cámara Polaroid en el set de rodaje y que salieron a la luz recientemente. Blade Runner está basada en el libro de Phillip K. Dick ¿Sueñan los androides con ovejas mecánicas? y se dice que dio origen al género conocido como Cyberpunk

El filme nos presenta una serie de elementos relacionados con la Inteligencia Artificial, objeto principal de este  blog, que pasamos a analizar a continuación. El primero de ellos, y al mismo tiempo, el más importante, son los replicantes en sí mismos. Nos encontramos frente a seres manufacturados que, a todos efectos, parecen personas reales: tienen iniciativa de actuación, instinto de supervivencia, conciencia de sí  mismos y del mundo que les rodea, son antropomorfos con capacidades incluso más desarrolladas a las de los humanos. La única diferencia  significativa que se podría apreciar es la obsolencia programada que dota a estos androides de una vida máxima de unos cuatro años.

En la película se pueden observar evidencias de este comportamiento casi humano: la capacidad para establecerse según relaciones jerárquicas (el replicante Roy es el jefe de los fugados); la posibilidad de mentir y de actuar a traición (Pris engaña a J. F. Sebastian para colarse en su casa y Zhora ataca a Deckard cuando él no lo espera); los replicantes sangran cuando se les hiere, no son robots con circuitos por vísceras, son seres orgánicos; los replicantes no nacen con sentimientos, pero pueden desarrollarlos, tienen capacidad de aprendizaje emocional (Rachael llora cuando se entera de que no es humana), además, pueden llegar a sentir atracción entre sí o entre humanos ( Roy con Pris y Rachael con Deckard) y, aún más sorprendente, pueden asustarse por la conciencia de la muerte y pueden reflexionar sobre sí mismos. 



Evidentemente, hoy en día no se ha podido crear ningún intelecto que pueda reunir estas características. Sí es cierto que se han creado robots antropomórficos, pero las diferencias entre estas máquinas  y los replicantes son abismales. Para empezar, mientras que los entes de la película serían autónomos, los androides necesitan programación o control de un humano, por lo que no son inteligentes. Por otro lado, los replicantes, como ya hemos dicho, son seres orgánicos, mientras que los robots son creados con materiales industriales. Parece que la ingeniería actual está muy lejos de lograr replicantes como los que se ven en Blade Runner y que no va encaminada a producir seres orgánicos, sino que se dirige hacia la creación de Inteligencia sobre ordenadores. 




Otro de los elementos de Iteligencia Artificial de la cinta son los animales artificiales. Las referencias a estos seres son muy limitadas, parecen ser iguales que los replicantes con la diferencia de que sus modelos pertenecen al mundo de la fauna. Suponemos que, aunque no se hable de ello en la película, estos seres disponen de la misma inteligencia que un animal y que cuentan con sus impulsos instintivos. Al igual que en el caso de los humanos, en la realidad no se ha podido alcanzar la creación de este tipo de animales artificiales. De igual forma, se han logrado robots con apariencia de animal (como los Animatronics de Disney), pero las diferencias serían las mismas que en el caso de los replicantes. 


La última de las piezas de Inteligencia Artificial que se presentan en Blade Runner es la máquina que emplea Deckard para ampliar las fotografías. Se trata de un dispositivo sencillo que interpreta y cumple órdenes orales muy precisas, por lo que su Inteligencia Artificial sería muy específica. Hoy en día se pueden encontrar mecanismos similares de reconocimiento de voz, como es el caso de Siri, desarrollado por Apple para su iPhone 4S.




Todas estas invenciones nos llevan a pensar en las implicaciones éticas que tendría convivir con los replicantes. En primer lugar nos encontramos frente a criaturas con apariencia humana y capaces de reconstruir sentimientos que están siendo diseñados exclusivamente para ser esclavizados. Ya hemos contado en los párrafos anteriores la proximidad del replicante al hombre, a lo que tendríamos que añadir que esta cercanía agrava el trato que esta sociedad  da a sus creaciones. Prácticamente son personas nacidas en laboratorio, capaces de sentir igual que cualquier otro ser humano, pero a los que se discrimina por su condición de nacimiento artificial. 


Por ello, las grandes preguntas serían ¿Hasta qué punto es un humano superior a un replicante? y ¿Cuál es la diferencia entre matar a un humano y matar a un replicante? En relación a esta última cuestión, al final de la película, cuando Roy muere, Ridley Scott muestra cómo una paloma blanca se escapa volando, lo que, sin duda, simboliza el alma replicante. Blade Runner nos da a entender que un ser orgánico que piensa, vive y siente igual que un hombre debe ser tratado como un hombre, es por ello que la película construye una crítica al comportamiento esclavista hacia los replicantes.



domingo, 12 de febrero de 2012

YO, ROBOT




Yo, Robot (2004) es una película de ciencia ficción dirigida por Alex Proyas cuya ficha técnica y sinopsis podéis ver aquí.

En el film se abordan algunas de las ideas sobre robótica de las novelas y relatos de Isaac Asimov.
No está basada en ninguna novela en particular, sino que recoge elementos de varias de ellas.

Como resulta obvio, en la cinta tanto el tema de la Inteligencia Artificial como el de la Robótica son las bases en las que se construye todo el relato.


Entre los elementos de I.A. que sí se pueden resolver encontramos:

-Todos los elementos relacionados con los sistemas G.P.S. tales como: los conducción automática en vehículos, los robots mensajeros o los robots basureros. Estos dos últimos no son del todo posibles, al menos no como en la película, por problemas en la movilidad de los robots; aunque las rutas serían fácilmente programables con precisos sistemas GPS como los que existen hoy en día.


-El reconocimiento de voz y los hologramas, siendo estos últimos una forma muy básica de I.A. basada en respuestas pregrabadas.


Los elementos de I.A. que no se pueden resolver serían:

-Los robots. Y es que, lo más destacado de la película son sus avanzados robots, tanto en el campo de la robótica como en el de la IA, campos que tienden a darse la mano. Hoy día, en ninguno de estos dos campos sería posible emular tales robots, pues, en el ámbito de la robótica lo más avanzado sería lo mostrado con el robot ASIMO.

-La consciencia de los robots de sí mismos, así como la capacidad de realizarse preguntas acerca del sentido de la vida o de tener miedo a la muerte. Tampoco la capacidad de pensar más allá de lo que tienen programado.

Por último, las implicaciones morales o éticas de este tipo de IA podrían ser:

-La capacidad de decidir si salvar a alguien o no basándose en meros datos matemáticos.

-Encomendar a los robots las tareas que los humanos no quieren hacer.

-El exceso de poder acumulado en un robot como VIKI, capaz de tomar decisiones propias que afectan a toda la humanidad.
Respecto a este punto, cabe destacar que la solución tomada por el ente robótico VIKI no parece del todo descabellada: observando que los humanos, destructivos por naturaleza, se están acercando a su propia autodestrucción ella decide que la mejor manera de protegerles (1ª Ley de la Robótica) es quitarles el poder.

Una decisión que, obviando la limitación de los derechos de libertad del hombre, sería una opción más que adecuada.